La tricomoniasis es una infección de transmisión sexual común, pero a menudo pasa desapercibida. A pesar de que existe la creencia de que la tricomoniasis se puede transmitir en el hogar, esto es muy raro. El principal modo de transmisión es por contacto sexual.
El principal modo de transmisión de la tricomoniasis es por contacto sexual. La infección no es resistente en el entorno y muere rápidamente fuera del cuerpo humano, por lo que la probabilidad de contagio en el hogar es mínima.
En las mujeres, la tricomoniasis puede agravarse en ciertos momentos del ciclo menstrual. Durante la menstruación, se crea un ambiente adecuado para el desarrollo de la infección, ya que el pH en la vagina se vuelve neutral o ligeramente ácido.
La infección puede ser asintomática, especialmente si se combina con otras enfermedades, como la clamidia o la gonorrea.
El método más sencillo y económico para diagnosticar la tricomoniasis es la microscopía nativa. El médico puede identificar la presencia de tricomonas inmediatamente después de un examen bajo el microscopio. Si la microscopía no está disponible, se puede usar la prueba PCR.
La tricomoniasis se trata con metronidazol. Es importante que el tratamiento sea oportuno y que ambos miembros de la pareja reciban tratamiento. Para prevenir reinfecciones, es necesario abstenerse de tener relaciones sexuales durante el tratamiento.
Si la tricomoniasis no se trata, pueden desarrollarse complicaciones, como inflamación crónica, infertilidad y otros problemas graves de salud.
Es importante acudir al médico al primer signo de infección para recibir un tratamiento eficaz y prevenir complicaciones.
Suscríbete para
mantenerte al día