Sofocos durante la menopausia: qué son y cómo enfrentarlos

Los sofocos son uno de los primeros síntomas con los que se enfrentan las mujeres mayores de 45 años, especialmente durante la perimenopausia y la menopausia. Estos episodios de calor pueden ser leves o bastante intensos, causando un gran malestar. Vamos a descubrir qué son los sofocos, por qué ocurren y cómo enfrentarlos.

¿Qué son los sofocos?

Los sofocos son una sensación repentina de calor, que ocurre debido a los cambios en el cuerpo de la mujer relacionados con la disminución de la función ovárica. Esto sucede cuando el reservorio ovárico disminuye y la cantidad de folículos que producen estradiol se reduce. Como resultado, ocurren fluctuaciones de temperatura acompañadas de sudoración, enrojecimiento de la piel y palpitaciones.

¿Por qué ocurren los sofocos?

La causa principal de los sofocos es la deficiencia de estrógenos, que ocurre a medida que se acerca la menopausia. Por lo general, en este contexto, también se producen cambios en el ciclo menstrual, que puede volverse irregular, con ciclos más cortos o más largos. Los sofocos son "las primeras señales" de que el cuerpo está comenzando a adaptarse a los cambios asociados con la menopausia.

¿Cómo se manifiestan los sofocos?

Al principio, los síntomas pueden ser leves: una ligera sensación de calor, por ejemplo, después de un estrés o en un ambiente caluroso. Sin embargo, con el tiempo, la intensidad y frecuencia de los sofocos aumentan, y pueden ocurrir a diario, e incluso varias veces en una hora.

¿Cómo enfrentarlos?

Existen varias formas de aliviar los síntomas de los sofocos y mejorar la calidad de vida. Consideremos los métodos más efectivos:

Terapia hormonal sustitutiva (THS) — uno de los tratamientos más efectivos, que ayuda a restaurar los niveles de estrógenos y a lidiar con los síntomas. Sin embargo, antes de utilizarla, se debe consultar con un médico.
Fitofármacos — remedios naturales a base de plantas que ayudan a aliviar síntomas como la irritabilidad, el insomnio y los sofocos. Sin embargo, no restaurarán el ciclo menstrual.
Fisioterapia y reflexoterapia — varios métodos como masajes o el uso de terapias con calor y frío pueden ayudar a aliviar los síntomas.

¿Qué hacer en casa para reducir los síntomas?

A continuación, se presentan algunos métodos sencillos que se pueden utilizar en casa:

Limitar el consumo de café. El café es un fuerte estimulante que puede intensificar los sofocos. Redúzcalo gradualmente o elimínelo por completo.
Usar una ducha contrastante. Alterne agua caliente y fría, terminando con agua tibia. Esto mejora la circulación sanguínea y reduce la intensidad de los sofocos.
Baños de manos con calor. Sumergir las manos en agua caliente y fría ayuda a reducir la intensidad de los sofocos.

¿Cuándo consultar a un médico?

Si los síntomas de los sofocos se vuelven demasiado frecuentes o intensos, es importante consultar con un médico. Esto es especialmente relevante en casos de menopausia precoz o temprana, para evitar consecuencias a largo plazo como la osteoporosis o enfermedades cardiovasculares. En tales casos, puede ser necesaria la terapia hormonal sustitutiva.

Cuide su salud y no tema pedir ayuda para mejorar la calidad de su vida y reducir los síntomas de los sofocos.